Sensomics: a new science for "unlearning" a very old technology

Sensómica: una nueva ciencia para desaprender una tecnología muy antigua.

Muy antigua, tan antigua como la biosfera, tan antigua incluso como el mundo físico, ya que la sensibilidad es manifiesta en la roca más dura que exista, solo es cuestión de saber sacarle la respuesta. En el mundo biológico, Margulis la resume en el tropismo, cuando le preguntan por la biofilia. En el mundo físico no existe el estado de carencia, y todas las cosas del querer, cuando de carencia estamos hablando. En el mundo físico solo existe deseo, puro, impulso adobado toda esa historiona de expeniecias sensibles de unas etiquetas u otras. Si Gaya es anisotrópica, se pueden bombardear a la tercera satélites-basura, para seguir decorando caprichosamente, nuestros firmamentos, pero es inútil querer, echar de menos, lo que no tenemos. Aferrarnos a la cultura de las catástrofes, quizás le hubiera gustado disfrutarla al tío tom, pero, si bien, como cualquier época de cambios, ya lo decían en China, es ante todo de curiosidad e incertidumbre, también, si queremos darle la vuelta a la locomotora, para salir provechosamente, del túnel civilizatorio, quizás podíamos pensar en la posibilidad de que, parar es parar. Parar la máquina, para reflexionar, un poquillo, digoyo, sería de personas, paises, culturas, pueblos, animales, vida, inteligente. Si no habría que solicitar muy pronto la entrada triunfal de la especie Homo sapiens, en la variedad Homo insapiens, el homo insípido, que a fuerza de perder meta diversidad sensacional, se creyó, de pronto, que todo el mundo era suyo, cogió más velocidad, se estrelló, como el ferrari de Pujol, y en vez de parar el motor, salirse del coche, y mirar como había quedado el cacharro, se queda metido en el ferrari, a punto de explotar, es decir, haciendo exactamente lo mismo que antes del accidente. Tampoco es el único accidente que ha habido en la historia del sapiens, ni de la vida. La cuestión es que Habemus Revolución. La revolucion epistemologica añorada está aquí, y haciendo ta estragos. Es un frente transdisciplinario, multicultural, horizontal, comunitarista, que con renovadas fuerzas se entrenta a esta crisis, con la seguridad de que si hay que dar dos metros de marcha a trás, al ferrari, aquí no ha pasado nada. Si en feis book vais opinando qué os parece un año sabático en todas las universidades, pues, que la paséis bien. Un año sabático a la japonesa. Sacar a las universidades del pozo ciego semantico y epistemologico en el que se metieron, en muy diversos grados, lógicamente. Si fuera de las academias el conocimiento ha crecido tanto, que ahora desborda pòr fín a las universidades, nadie se debería sentir culpable de ello, sino alegrarse de que esas semillas en esos departamentos facultades y universidades, sembradas diligentemente desde por decir algo cincuenta años, medio siglo de ilusiones compartidas, no solo en los senos académicos, sino en las bahías alternativas de las o ene gés, y cualesquier lugar en el que aprendíamos ansiosos, saberes que desconocíamos, dada la peculiaridad del consciente colectivo construido en cada uno de los campos epistemológicos que denominamos "Estado". Claro, esto era antes de internet. por eso es un gozo hablar de ellos, desde la catarata del iguazú que cae marrón, arrastrando todo ese lodo fertil de las selvas del saber y de la convivencia, donde como hormiguitas tratando de reaccionar hábilmente al pinche tirano, iban a lo suyo, aprendiendo, disfrutando, conviviendo, construyendo. La masa (crítica) se ha salido por las ranuras de la puerta del horno. Reiniciar chaman, un proyecto indígena de ayuda al desarrollo del norte. La segunda frase es de un maestro de danza y filosofía indígena Mexika, nos puedes encontrar en la calle simbiodiversidad (blogspot.com), como bastante abajito, verás una foto en la facultad de ciencias de la UMA, un grande y hermoso círculo de Chitontiquiza, en el sincretismo de las fiestas de san alberto magno. Un gran tambor Hue Huetl, y gente que de esa manera, tienden lazos reales y dinámicos, con ese mundo físico vibrante de olivos, siemprevivas, cerrajas, lapas, mirlos, gaviotas, y cientos de viversidades, de diversidades vitales, que en la sutil y transfinita forma de sensaciones, nos invaden y nos hacen invadir, como en el juego de "la llevas", a su vez, con nuestra atención a ese espectáculo concierto magno magnísico, que como una bufanda dinámica sensorial, te cubre y arropa, te da compañía, te regala tu ser, creciendolo, in de fi ni da men te...

(Disfruten este wiki artículo, desde la óptica aquí dada, de que es el movimiento, nuestro movimiento, lo que anima nuestro animal y por tanto abre nuestras puertas de la percepción a la infinita sensosfera...)