La revolución obligada que estamos empezando a vivir terminará conectándonos de nuevo con ´´Gaia´´. El disfrute y la alegría que brota del grupo de locos que rechazamos cualquier tipo de violencia; cualquier brote neuro-pandémico de analfabetismo emcional y espiritual; y en cambio nos dedicamos a abrir de par en par las puertas del chorreo incesante de amor que nos llega del universo: energía e información; se va a expndir en microsegundo por todo el planeta, nadie se va a salvar.
La decisión de aprender a disfrutar del número infimoniko de posibilidades que cómo ser cósmico nos pertenece, disfrutar de nuestros sentidos, de nuestra tranquilidad espiritual, de nuestra conexión con el multiverso, es el regalo que está revolución de la vida y del conocimiento nos está trayendo. Los rasgos idisioncráticos de ser humano creador, vivo, feliz, agradecido, en paz con el mísmo, con su familia, con sus vecinos, es el regalazo que el cambio de vibración y magnetismo hacía el que va el planeta nos va a dar. Las guerras y la destrucción pasarán a formar parte del pasado y
serán recordadas como una pandemia mental qye ya pasó. Ningún Díos va a venir a castigarnos, no va a caer ningún meteorito que destruya el planeta, lo que vamos es a cambbiar de vibración y ´´Gaia´´ se va a encargar de que en este planeta se siga bailando, cantando, riendo, llorando ( gerunding puro) y devolvernos a lo que siempre hemos sido: pura efervescencia, puro fluir, puro tránsito hacía lo mejor de nosotros mismos